Una investigación comisionada por Luminate y realizada por el Instituto Ipsos muestra que de 4,400 personas encuestadas, la mayoría (55%) en Argentina, Brasil, Colombia y México apoya la participación de las personas LGBT+ en posiciones políticas y está a favor de una mayor representación. Al comparar el apoyo al aumento de la representación entre los países de la muestra, Brasil se destaca con el 59%, seguido de Argentina con el 55%, y Colombia y México, ambos con el 51%.
Luminate es la fundación global que trabaja para garantizar que todas las personas tengan la información, los derechos y el poder de influenciar las decisiones que impactan a la sociedad. Con esta investigación titulada “LGBT+ en la política: percepciones del electorado en América Latina” revela datos importantes sobre la representación de la comunidad LGBT+ en la región.
Respecto a que personas LGBT+ se postulen y ocupen cargos públicos, en México el 59% respondió que estaba total o parcialmente de acuerdo, resultado por debajo del promedio de la región, que fue del 63%. Para el 63% de las personas mexicanas encuestadas, la diversidad de voces, incluyendo a las personas LGBT+, es un aspecto esencial para la democracia, cifra alineada con el promedio regional.
«La ciudadanía quiere y merece una democracia verdaderamente representativa, en la que todas las personas, incluidas las personas LGBT+, puedan participar activamente en la construcción de una sociedad más justa«, afirmó Felipe Estefan, vicepresidente de Luminate para América Latina. «La versión de la democracia que las personas esperan ver en el futuro incluye todos los colores del arcoiris«.
La investigación LGBT+ en la política: percepciones del electorado en América Latina también mostró que, de entre las candidaturas de la diversidad sexual y de género, son las de las personas trans quienes enfrentan una mayor resistencia por parte del electorado en los cuatro países. El 49% de la muestra dijo que se sentía completamente cómoda con que las personas transgénero asumieran cargos públicos en sus países. Para las mujeres lesbianas, el resultado fue del 53%. Para los hombres gays, el 52%. En México, los resultados fueron de un 40% para personas trans; 48% para mujeres lesbianas, y 45% para hombres gays.
Creer en el valor de la igualdad impulsa el apoyo a una mayor representación.
El estudio también reveló que el apoyo a la representación LGBT+ en la política está impulsado por una creencia del valor de la igualdad para todas las personas, y no necesariamente por un reconocimiento de las contribuciones únicas de la comunidad LGBT+ en cargos públicos. Después de Argentina, México es el país que más expresa esa perspectiva. Entre las personas encuestadas mexicanas, el 66% apoya la implementación de directrices que promuevan la igualdad, independientemente de la orientación sexual o la identidad de género de quienes estén en el poder. En Argentina la cifra es del 70%; en Colombia, del 63%; y en Brasil, 53%.
Además, menos de la mitad del electorado mexicano, un 42%, afirmó estar de acuerdo, en cierta medida, con que la falta de representación política atenta contra la garantía de derechos de la comunidad LGBT+. En Argentina, la cifra es del 40%, en Colombia del 47%, mientras que en Brasil es del 51%, el único con mayoría, incluso dentro del margen de error.
Solo el 19% de las personas encuestadas en México apoya total o parcialmente que las personas LGBT+ dediquen su labor política principalmente a temas específicos de la comunidad LGBT+. Cuando se les preguntó si creen que las personas LGBT+ aportan una perspectiva única a los procesos de toma de decisiones en política, poco menos de la mitad respondió afirmativamente: el 47% del electorado mexicano está de acuerdo total o parcialmente.
“Las personas LGBT+ enfrentan desigualdades, violencia y discriminación en América Latina. Asegurar su participación en la vida política es fundamental para evitar retrocesos y avanzar en la garantía de sus derechos”, dice Estefan, quien agrega: “De igual forma, traen miradas plurales a temas de interés para toda la sociedad. Necesitamos trabajar colectivamente para que encuentren espacio en los partidos políticos, puedan postularse y, una vez sean elegidas, tengan seguridad para ejercer un liderazgo que promueva los derechos y la igualdad para todas las personas”.