Asociaciones, barras de abogados, abogadas y académicos, no conciben como hay personas que fingen, mienten y se jactan de ser humanistas, altruistas y de ayudar a los pobres y hacen todo lo contario, por intereses materiales, económicos, mercantiles y más bien lucran con las necesidades de la gente y cuando a sus intereses convengan, abusan, les quitan los apoyos, buscan matar de hambre y quitarles sus fuentes de empleos. Además estos tipos de acciones perversas con dolo jurídicamente tienen responsabilidad legal que llegan a caer en un delito y muy grave, como los genocidios. Pero más que lo legal, está lo humano. Porque ir a fondo en lo legal, por donde se busque, tan solo el hecho del respeto a las garantías individuales y todos los derechos que protegen, cuidan y defienden por ley al ciudadano y la persona.
En Yucatán está pasando algo inconcebible, Cristina Muñoz Menéndez, fundadora de Indignación .A.C, misma que tiene como centro de operaciones principales la península de Yucatán, viola tajantemente los derechos constitucionales y de organismos internacionales tanto al trabajo y a una alimentación digna, así lo aseguró, el reconocido académico Roberto Márquez, de la escuela de Derecho, además de ser unos de los prestigiados litigantes en diversos tribunales.
Destacó que conforme al Artículo 4, tercer párrafo de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos se establece que “Toda persona tiene derecho a la alimentación nutritiva, suficiente y de calidad. El Estado lo garantizará”.
En tanto que el artículo 27° establece que: “El desarrollo rural integral y sustentable tendrá entre sus fines que el Estado garantice el abasto suficiente y oportuno de los alimentos básicos que la ley establezca” y el artículo 123 garantiza el derecho al trabajo, siempre que sea honesto.
¿Qué dice el Artículo 123 de la Constitución?, puntualizó: “Toda persona tiene derecho al trabajo digno y socialmente útil; al efecto, se promoverán la creación de empleos y la organización social de trabajo, conforme a la ley”.
Por eso, destacó, al atacar la fundadora de esta organización la generación de empleos legales está atentando contra estos derechos, resaltó.
En este contexto, como se sabe en todo México y en especial en la península miles de mayas padecen desnutrición, que agregó el litigante Márquez, es la carencia crónica y desequilibrada de alimentos, que es causante de alteraciones en el crecimiento físico, el desarrollo cognoscitivo y motor, además de la inmunidad ocasionada por la pobreza, la ignorancia en ciertos aspectos nutricionales y el aislamiento geográfico.