La presidenta del Senado de la República, Laura Itzel Castillo Juárez, hizo un llamado a los jóvenes para avanzar en la transformación, para “caminar juntos” y luchar por las grandes utopías de nuestro país: la democracia, la justicia y la paz.
Castillo Juárez asistió a la inauguración de la Escuela de Formación por la Paz y la Democracia Vol. 1 “Estudiantes del 68”, evento organizado con el Instituto Mexicano de la Juventud (IMJUVE).
En ese encuentro, la legisladora compartió a los jóvenes su experiencia en la lucha social y política. Reiteró que la política es el vehículo para transformar la patria ante la injusticia y la desigualdad.
Recordó que de niña visitaba a su padre, Heberto Castillo Martínez, en la cárcel de Lecumberri, conocida como “El Palacio Negro», donde estaba preso “no por haber cometido un delito, sino por luchar por la democracia y la libertad en este país”.
“Cuando yo pasaba por esos pasillos con mis tres hermanos y con mi madre, para ir a visitar a alguien que estaba allí, no por haber cometido ningún delito, sino por haber luchado por la democracia y por la libertad en este país; había un grafiti que era como un grito en la pared que decía: “En este lugar maldito donde reina la tristeza, no se castigue el delito, se castiga la pobreza”.
Y por eso una de las frases más importantes de nuestra lucha, agregó, es “Por el bien de todos, primero los pobres”, porque eso marca la importancia de la lucha que nosotros hemos dado por la democracia, por la justicia en nuestro México.
Después de recordar sus actividades políticas en su juventud, en organizaciones de izquierda, de reconocer las aportaciones de líderes como Demetrio Vallejo, de Valentín Campa y de su padre, Heberto Castillo, la senadora mencionó que en aquella época no se imaginaba que se fueran a alcanzar programas como las becas para estudiantes, el apoyo para los Jóvenes Construyendo el Futuro o el programa de vivienda para este sector de la población, que son recursos importantes para el desarrollo de la juventud.
Destacó que en México ya no hay rechazados en la educación media superior y superior, un problema que incluso generó movimientos sociales, porque los jóvenes no tenían este acceso a la educación.
“Eso es lo que nos da mucha satisfacción, que por lo que luchamos hace muchos años, ahora estamos viendo que se está cristalizando, pero ahora, ustedes y nosotros, los más grandes, tenemos el orgullo, el placer, la dicha de contar con el segundo piso de la Cuarta Transformación”, expresó.
Estos sueños que a veces parecen inalcanzables, son lo que nos nutren para seguir avanzando, dijo la presidenta de la Mesa Directiva, que recordó una cita del escritor Eduardo Galeano:
“La utopía está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos más. Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, parece que nunca la voy a alcanzar. Entonces, ¿para qué sirve la utopía? -se pregunta él- Pues sirve para eso, sirve para caminar”. Entonces, yo los invitaría a que sigamos caminando”, expresó la senadora..
En su conferencia magistral, el senador Gerardo Fernández Noroña destacó la lucha pacífica que llevaron a cabo los jóvenes del 68 por la democracia, la paz y la justicia en el país, lo que representó uno de los más brutales hechos de represión ocasionada por otros sistemas de gobierno.
Al expresar que los logros actuales son resultado de una lucha de muchos años, dijo que aún hay mucho por hacer para combatir el clasismo y el racismo, así como para promover la solidaridad y el servicio. “Decimos en nuestro movimiento que primero los pobres y no hemos llegado a los más pobres de este país, hay gente en situación de calle y eso es inaceptable”.
Llamó a erradicar todo tipo de violencia en contra de las mujeres. No vale la violencia en contra de ningún ser humano porque en el centro debe estar siempre el respeto a la dignidad de las personas.
Por último, motivó a los jóvenes a ganar espacios con el liderazgo en los hechos y el trabajo con la gente y la solidaridad.