Realizan Seminario Internacional de Cirugía Estética e impulsan reformas para profesionalización

Especialistas de México y varios países y senadores participan en el XXIX Congreso Internacional de Medicina Estética, Cirugía Estética y Obesidad, que se realiza en el Centro Cintermex de Monterrey, organizado por la Universidad del Conde y el Instituto de Estudios Superiores en Medicina (IESM), dirigido por el Dr. Marco Antonio Conde Pérez.

Durante el evento, se destacó la importancia de concretar reformas pendientes de aprobar para erradicar a los “charlatanes” que ejercen sin título, pero también cerrar a las “universidades” que preparan al vapor, en menos de un año a supuestos especialistas.

El doctor Marco Antonio Conde Pérez, expuso la importancia de la educación continua en el ámbito de la medicina estética. El evento cuenta con la participación de 60 ponentes de renombre internacional que abordarán temas innovadores en procedimientos y tratamientos estéticos.

El Congreso, que se extenderá hasta el 10 de agosto, se ha consolidado como un evento clave en América Latina y a nivel mundial, reuniendo a expertos y profesionales del sector para compartir conocimientos y avances en la materia.

En México cada año se registran decenas de fallecimientos y cientos de personas con graves secuelas de salud por las malas prácticas en la llamada “cirugía estética” que frecuentemente se realiza en clínicas “patito” o clandestinas, salones de belleza o spas donde por sumas que van de los 2 mil a los 500 mil pesos se aplica desde botox, implantes de senos o aumento de glúteos.

De acuerdo con la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva (AMCPER), antes de la pandemia, es decir en 2017, México ocupaba el tercer lugar a nivel mundial en procedimientos quirúrgicos de esta clase, con millón 36 mil 618 cirugías. Sólo superado por Estados Unidos y Brasil.

Al respecto, Senado de la República heredará a la próxima Legislatura un paquete de iniciativas que buscan frenar las muertes y daños a personas que recurren a hospitales de medicina estética, clínicas de belleza, spas, que no están certificados, ni cuentan con personal capacitado para dichos procedimientos.

Dichas reformas a la Ley General de Salud establecen que quienes realicen en México cualquier tratamiento de medicina estética tenga un título de médico y prohibir tajantemente que las estéticas spas y gimnasios no podrán realizar ningún procedimiento de medicina estética como son las aplicaciones de botox y toxina botulínica así como otros procedimientos.

La reforma que adiciona el Capítulo III Bis, De la Medicina Estética, y el Artículo 115 Bis, ambos de la Ley General de Salud, indica que “la medicina estética tiene como finalidad la realización de prácticas médicas y cosméticas, relacionándose con diferentes áreas terapéuticas de pequeño intervencionismo, en las que se emplea anestesia tópica o local y un régimen ambulatorio”.

José Ramón Enríquez, senador por Morena e impulsor junto con José Narro de estas reformas, dijo que por cada muerte que hay por mala praxis de cirugía estética existen cientos de casos de personas que se ven afectadas por la mala práctica de la medicina estética en donde labora personal que no cuenta con la certificación, ni los estudios necesarios, lo cual es un grave riesgo para la salud de miles mexicanos que recurren a esos sitios.

“En México en cientos o miles de estéticas, spas y gimnasios se realizan procedimientos que pueden generar daños irreversibles en manos de personas que no son médicos y que no tienen conocimiento sobre la medicina estética. Cada año se presentan cientos de casos de personas que han sido afectadas”.